El pasado no lo puedes cambiar, pero puedes reconciliarte contigo, abrazarte y construir un nuevo presente para ti, un presente en dónde te aceptes, te ames, te respetes, te comprendas y te cuides.
He trabajado a lo largo de más de 15 años con mujeres…
Inicié mi vida profesional trabajanado con casos e historias de violencias, incluidas las violencias sexuales en mujeres, niñas y niños; esa labor me permitió tener una perspectiva sensible frente a las necesidades de las mujeres, reconocer la importancia de acompañar con herramientas que favorezcan la empatía, la escucha, la sororidad y un espacio que realmente sea libre de prejuicios, para poder sanar y empoderar.
Posteriormente me desarrollé en temas de Salud Sexual y Reproductiva a lo largo de 10 años, fue un trabajo que me permitió viajar para conocer a muchos profesionales de la salud y a muchas mujeres en distintas condiciones (no sólo económicas, sino de raza, ubicación geográfica, creencias, dinámicas…) en fin, fue un espacio sumamente enriquecedor en dónde reafirmé mi compromiso frente a las mujeres, porque resulta muy difícil y estigmatizante tomar decisiones reproductivas, tomar decisiones frente al cuerpo y al placer.
Muy de la mano, me mantuve activa en las consultas privadas, identificando serios problemas en las relaciones de pareja y en lo erótico; una constante en las exploraciones que tenían en sesión, era el tema de violencia sexual en alguna etapa de la vida, con mucha frecuencia en las infancias.
Asimismo, parece que hay una guerra constante de nosotras mismas frente al cuerpo. Un malestar generalizado de la imagen corporal y que se perpetúa a lo largo de la vida; es decir, se es muy delgada, muy obesa, muy vieja, muy grande, muy canosa, muy “fea” y durante años esta lucha constante genera estragos de inseguridad.
Fue por ello que decidí dedicarme de lleno a este proyecto llamado Amándome Bonito; un espacio en dónde acompaño en procesos terapéuticos a mujeres que desean Reconectar con ellas mismas, Reconectar con el placer, Soltar experiencias de violencia que marcaron sus vidas y Tomar decisiones reproductivas que sólo les competen a ellas.
Un espacio en dónde cada una pueda sentirse Libre de ser quien es…
Hoy me siento muy dichosa de poder acompañar a muchas mujeres que al igual que yo, vivieron experiencias dolorosas, de confusión, de “sentirse perdidas” y lograr con la terapia encontrar su propio camino.
Así que en este espacio encontrarás el acompañamiento que requieres para encontrarte, aceptarte, amarte y reinventarte.
He trabajado a lo largo de más de 15 años con mujeres…
Inicié mi vida profesional trabajanado con casos e historias de violencias, incluidas las violencias sexuales en mujeres, niñas y niños; esa labor me permitió tener una perspectiva sensible frente a las necesidades de las mujeres, reconocer la importancia de acompañar con herramientas que favorezcan la empatía, la escucha, la sororidad y un espacio que realmente sea libre de prejuicios, para poder sanar y empoderar.
Posteriormente me desarrollé en temas de Salud Sexual y Reproductiva a lo largo de 10 años, fue un trabajo que me permitió viajar para conocer a muchos profesionales de la salud y a muchas mujeres en distintas condiciones (no sólo económicas, sino de raza, ubicación geográfica, creencias, dinámicas…) en fin, fue un espacio sumamente enriquecedor en dónde reafirmé mi compromiso frente a las mujeres, porque resulta muy difícil y estigmatizante tomar decisiones reproductivas, tomar decisiones frente al cuerpo y al placer.
Muy de la mano, me mantuve activa en las consultas privadas, identificando serios problemas en las relaciones de pareja y en lo erótico; una constante en las exploraciones que tenían en sesión, era el tema de violencia sexual en alguna etapa de la vida, con mucha frecuencia en las infancias.
Asimismo, parece que hay una guerra constante de nosotras mismas frente al cuerpo. Un malestar generalizado de la imagen corporal y que se perpetúa a lo largo de la vida; es decir, se es muy delgada, muy obesa, muy vieja, muy grande, muy canosa, muy “fea” y durante años esta lucha constante genera estragos de inseguridad.
Fue por ello que decidí dedicarme de lleno a este proyecto llamado Amándome Bonito; un espacio en dónde acompaño en procesos terapéuticos a mujeres que desean Reconectar con ellas mismas, Reconectar con el placer, Soltar experiencias de violencia que marcaron sus vidas y Tomar decisiones reproductivas que sólo les competen a ellas.
Un espacio en dónde cada una pueda sentirse Libre de ser quien es…
Hoy me siento muy dichosa de poder acompañar a muchas mujeres que al igual que yo, vivieron experiencias dolorosas, de confusión, de “sentirse perdidas” y lograr con la terapia encontrar su propio camino.
Así que en este espacio encontrarás el acompañamiento que requieres para encontrarte, aceptarte, amarte y reinventarte.